Viejas Historias de Castilla la Vieja / la Mortaja / la Partida Delibes, Miguel Iberoamericana Vervuert |
Literatura en las Cartografías Regionales del Cono Sur, La Guerrero, Jorge Carlos Iberoamericana Vervuert |
Título: Polvos de Arroz | ||
Autor: Galindo, Sergio | Precio: $70.00 | |
Editorial: Universidad Veracruzana | Año: 2007 | |
Tema: Literatura, Lectura, Novela | Edición: 4ª | |
Sinopsis | ISBN: 9789688347973 | |
Polvos de arroz no fue la primera novela de Sergio Galindo, pero sí la primera que publicó, una de las más estudiadas y reeditadas entre sus obras, y la que inaugurara la colección Ficción de nuestra universidad en 1958. Otras de sus novelas son La justicia de enero, La comparsa, El bordo y Otilia Rauda.
Narra, en retrospectiva, las enfermizas intimidades de una familia xalapeña, al interior de un caserón húmedo, donde transcurren las pocas y raquíticas existencias de que el autor se ocupa. Escrita dentro de un realismo con tintes psicológicos y de costumbrismo, esta novela corta -nos dice Sergio Pitol en el ensayo que precede a la obra- es la historia de un combate doloroso, grotesco, entre las dos fuerzas que marcan la vida: Eros y el Tánatos. Historia triste y ridícula, pero escrita, modulada y resuelta con intensa perfección. Se trata de la vida de Camerina Rabasa, una niña vieja e inmensamente gorda, una mujer que apenas se ha dado cuenta, y eso muy superficialmente, de las vicisitudes de su existencia, del aire mortecino que durante setenta años ha respirado en su hogar y que, de pronto, en su provecta edad, es herida por la flecha de Cupido, el implacable. Camerina es víctima y autoverdugo a un tiempo. En su descabellada pasión senil, la protagonista despierta ternura, ridículo, lástima. El desenlace de la historia mezcla la piedad y el escarnio. Esta novela podría parecer un melodrama, una típica película mexicana, pero el talento de Galindo esquiva los peligros de la anécdota. No cae en el sentimentalismo ni en la caricatura. La sujeción de tono y de ritmo, la perfecta estructura del relato, la elegante distancia con que el narrador cuenta esta historia simple contribuyen a su eficacia. |